Los feocromocitomas y los paraganglioma son tumores neuroendocrinos que pueden producir cantidades excesivas de hormonas llamadas catecolaminas. Estas hormonas incluyen adrenalina, noradrenalina, y dopamina. La producción excesiva de noradrenalina y/o adrenalina puede causar hipertensión arterial y complicaciones tales como infartos del corazón, anginas o dolor de pecho, arritmias, falla cardiaca, falla renal, accidentes cerebrovasculares, infartos intestinales, edema o congestión pulmonar y ceguera.

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Estos tumores se dan por igual en hombres y en mujeres y pueden suceder a cualquier edad aunque son más frecuentemente diagnósticos entre la tercera y quinta décadas de la vida. Un 30 a 40% de estos tumores son hereditarios y por lo tanto es importante que toda persona con un feocromocitoma o un paraganglioma reciba consejería genética. Hasta un 25% de estos tumores pueden diseminarse. Detectados a tiempo, los feocromocitomas y los paragangliomas se pueden tratar y curar con cirugía. La remoción del tumor hace que los síntomas desaparezcan, normaliza la presión arterial, y evita su diseminación.

Mira los videos a continuación con subtítulos en español.

¿Qué es el feocromocitoma?

¿Qué es el paraganglioma?

Feocromocitoma

El feocromocitoma es un tumor raro, usualmente de crecimiento lento, originado en el centro de las glándulas adrenales conocido como la medula adrenal. Estas glándulas se encuentran sobre los riñones y por esta razón también se les conocen como las glándulas suprarrenales. Bajo condiciones normales, la medula adrenal secreta hormonas conocidas como catecolaminas; estas hormonas incluyen la adrenalina y la noradrenalina.

La adrenalina y la noradrenalina son hormonas de respuesta a stress y como tales preparan al individuo para enfrentar cualquier peligro causando las llamadas respuestas de escape y pelea. Las hormonas interactúan con todas los órganos y tejidos del cuerpo y elevan la presión arterial, hacen que el corazón trabaje mas rápido, y hacen a la persona irritable. Como tumor originado en la medula adrenal, el feocromocitoma puede producir excesivas cantidades de catecolaminas causando síntomas de stress aunque la persona no se encuentre en una situación de stress.

Paraganglioma

El Paraganglioma es otro tumor raro y usualmente de crecimiento lento que a diferencia de los feocromocitomas se origina en los ganglios del sistema nervioso autónomo ubicados fuera de las glándulas adrenales. Los ganglios del sistema nervioso autónomo se encuentran en el cuello, el tórax, el abdomen y la pelvis y consecuentemente los paragangliomas se pueden encontrar en estas zonas.

El 85% de los paragangliomas se encuentran en el abdomen y en la pelvis, un 12% se encuentran en el tórax y un 3% se encuentran en el cuello. Al igual que los feocromocitomas, los paragangliomas localizados en el tórax, abdomen, y pelvis pueden producir noradrenalina y subsecuentemente causan síntomas similares a los de los feocromocitomas. Los paragangliomas del cuello rara vez producen noradrenalina; por lo tanto, la mayoría de estos tumores no causan síntomas hormonales.

Síntomas

La producción hormonal de los feocromocitomas y los paragangliomas puede causar síntomas muy variados que cuando son reconocidos, pueden permitir la identificación de estos tumores. Muchos de estos síntomas no son específicos y hay otras condiciones no relacionadas con feocromocitomas o paragangliomas que también les pueden causar.

Signos o síntomas de feocromocitomas o paragangliomas pueden incluir los siguientes:
• Hipertensión arterial – constante o episódica
• Palpitaciones o taquicardia
• Sudoración profusa
• Dolor de cabeza pulsátil
• Temblores
• Palidez
• Falta de aire
• Sensación de pánico

Otros síntomas incluyen:
• Ansiedad
• Dolor abdominal
• Estreñimiento
• Pérdida de peso

Los síntomas pueden ser desencadenados o exacerbados por los siguientes factores:
• Ejercicio físico
• Ansiedad o stress
• Cambios posturales
• Deposiciones
• Trabajo de parto
• Cirugía – Anestesia
• Cafeína
• Ciertas medicaciones, por ejemplo: descongestionantes, anfetaminas, cocaína, esteroides medicaciones psiquiátricas llamados inhibidores de la monoamino oxidase (IMAOs) como la fenelzina, tranylcypromina, e isocarboxazida.
• Comidas ricas en tiramina, por ejemplo: quesos curados (por ejemplo quesos europeos), cerveza, vino, carnes y pecados ahumados o curados, aguacates, bananos, habas.
• kimchi

¿Cuándo buscar ayuda médica?
• Cuando se sienta alguno de los síntomas mencionados anteriormente
• Hipertensión en niños, adolescentes, o personas jóvenes
• Presión arterial difícil de controlar
• Historia familiar de feocromocitoma y/o paraganglioma
• Historia familiar de neoplasia endocrina múltiple tipo 2, enfermedad de von Hippel Lindau, Neurofibromatosis tipo 1 o síndromes de paaraganglioma.

Feocromocitomas y paragangliomas son conocidos como los grandes imitadores. Por lo tanto, puede ser difícil distinguirles de otras condiciones médicas que no están relacionadas con ellos. A continuación, se presenta el diagnóstico diferencial de condiciones que causan síntomas similares a los de los feocromocitomas o paragangliomas pero que no son feocromocitomas o paragangliomas:

Causas endocrinas:
• Hipertiroidismo
• Síndrome carcinoide
• Hipoglicemia
• Cáncer medular de tiroides
• Mastocitosis
• Menopausia

Causas cardiovasculares:
• Falla cardiaca
• Arritmias
• Angina
• Sincope, hipotensión ortostática
• Enfermedad renovascular

Causas Neurológicas:
• Migrañas
• Epilepsia autónoma di encefálica
• Meningioma
• POTS (síndrome de taquicardia ortostática postural)
• Síndrome de Guillain-Barre
• Encefalitis

Psicológicas:
• Ansiedad y ataques de pánico
• Desordenes de somatización
• Hiperventilación

Farmacológicas:
• Antidepresivos tricíclicos
• Cocaína
• Abstinencia de alcohol
• Estimulantes adrenérgicos
• Suspensión abrupta de clonidina
• Antagonistas de dopamina
• Inhibidores de Monoamino oxidasa
• Efedrina

Otras:
• Neuroblastoma, ganglioneuroma, ganglioneuroblastoma
• Porfiria intermitente aguda
• Mastocitosis
• Ruborización espontanea
• Anafilaxis
• Intoxicación con plomo o mercurio

Diagnóstico

Preparacion para la consulta

En el caso que se sospeche que tiene un feocromocitoma o un paraganglioma, debe ser evaluado por un médico especializado en afecciones hormonales conocido como endocrinólogo.

Antes de acudir a la visita médica, recomendamos hacer una lista que incluya la siguiente información:
● Signos o síntomas que puedan ser motivo de preocupación.
● Registro de la frecuencia y de la duración de los síntomas.
● Cambios o situaciones de estrés recientes en su vida.
● Lista de todos los medicamentos -incluidos los de venta libre, los recetados y los suplementos dietéticos- y sus dosis ya que estos pueden afectar a los resultados de las pruebas bioquímicas.
● Registro del consumo habitual de alimentos y bebidas
● Antecedentes familiares de enfermedades

Descargue y envíe a tu equipo médico las guías de práctica clínica de la Endocrine Society que puedes encontrar aquí.

Como mencionado anteriormente, a los feocromocitomas y los paragangliomas se les conoce como el “gran imitador” y muchas veces se confunde con enfermedades más comunes. Por lo tanto, descubrir o diagnosticar los feocromocitomas puede ser todo un desafío. En una encuesta realizada a pacientes con feocromocitoma y/o paraganglioma recientemente, el 35% de los encuestados indicaron que pasaron más de 4 años antes de ser diagnosticados con esta enfermedad.

El diagnostico de los feocromocitomas y los paragangliomas se puede confirmar o descartar midiendo los niveles de metanefrinas (productos de degradación de las catecolaminas) en una muestra de sangre o en orina recolectada en un periodo de 24 horas. Las metanefrinas son liberadas continuamente por el tumor, a diferencia de las catecolaminas, que suelen ser liberadas en forma esporádica. Esta liberación continua de metanefrinas desde el tumor explica por qué se prefieren las pruebas de medición de metanefrinas a las pruebas de medición de las catecolaminas. En raras ocasiones un feocromocitoma o un paraganglioma en el tórax, abdomen, o pelvis, y a menudo aquellos localizados en la cabeza o el cuello no producen catecolaminas ni metanefrinas. En estos casos, el método preferido para el diagnóstico es un estudio de radiología.
La eficacia de las mediciones de metanefrinas en orina de 24 horas y en plasma es similar y cualquiera de ellas puede proporcionar un diagnóstico preciso (Ambas pruebas tienen una precisión aproximada del 95%).

La prueba de orina de 24 horas:
La prueba de metanefrinas en orina de 24 horas mide las metanefrinas fraccionadas (metanefrina y normetanefrina) en orina. La recolección de orina de 24 horas se realiza recogiendo la orina en un recipiente especial durante un periodo de 24 horas. Esto puede resultar menos cómodo que el análisis de sangre. Cuando la recolección de orina de 24 horas es incompleta, el resultado de la prueba puede resultar ser falso negativo (resultado normal pese a que el paciente tiene un feocromocitoma). En, los pacientes con feocromocitomas y paraganglioma que producen catecolaminas, los resultados de metanefrinas están elevados al menos dos o más veces del límite superior de la normalidad.

Prueba en sangre:
La prueba de las metanefrinas libres (metanefrina y normetanefrina) en plasma mide la cantidad de metanefrinas en la sangre. Esta prueba, comparada con la prueba de orina de 24 horas, puede ser más cómoda, ya que sólo hay que extraer sangre una vez. La Guía de la Sociedad de Endocrinología sugiere que la extracción de sangre se realice después de que el paciente haya descansado brevemente y esté en posición supina (acostado boca arriba). Los pacientes que tienen feocromocitomas o paragangliomas suelen tener niveles de metanefrinas plasmáticas elevados dos o más veces el límite superior de la normalidad. Algunos laboratorios no siguen las recomendaciones de las guías. En casos de resultados confusos, la prueba se debe repetir estando acostado por 30 minutos.

3-Metoxitiramina
La 3-metoxitiramina (3MT), que es el producto de metabolización de la dopamina. Esta prueba se solicita en algunas ocasiones. Se trata de un análisis de sangre que puede ser moderadamente útil en pacientes con síntomas claros para confirmar un diagnóstico de feocromocitoma. Es útil ante la sospecha de tumores secretores de dopamina. También puede ser útil para identificar a pacientes con paragangliomas de cabeza/cuello.  Esta prueba de 3-MT no está disponible en la mayoría de países del mundo incluyendo los Estados Unidos.

Resultados falsos negativos/falsos positivos/indeterminados
A veces, los resultados de las pruebas son falsos negativos (resultado normal en un paciente con feocromocitoma), falsos positivos (resultado anormal en un paciente sin feocromocitoma) o indeterminados (los niveles pueden ser ligeramente superiores al límite superior de la normalidad). En este último caso, su médico puede volver a realizarle la prueba o considerar la posibilidad de obtener imágenes.

¿Cuáles son las causas de falsos negativos?
• Tumores muy pequeños
• Tumores que no producen catecolaminas
• Recolección de orina incompleta

¿Cuáles con las causas de un falso positivo?
• La sangre se extrajo en posición sentada. Las guías de la Sociedad Endocrinología sugieren que la sangre se extraiga después de que el paciente haya descansado brevemente y esté en posición supina (acostado sobre su espalda). A pesar de estas recomendaciones, muchos laboratorios no siguen esta guía. Es recomendable comentar estas guías con su médico para pedirle que siga las instrucciones de diagnóstico adecuadas.
• Dolor intenso, insuficiencia cardíaca o estrés físico o emocional agudo.
• Suplementos, algunos medicamentos recetados o de venta libre o drogas ilícitas (véase a continuación una lista que puede afectar a los resultados).
•Comunícale a al médico todos los medicamentos recetados y de venta libre, suplementos y drogas ilícitas que estés tomando. No dejes de tomar los medicamentos recetados sin consultar antes a tu médico.
Esta es una lista de medicamentos/sustancias que pueden afectar a los resultados de las pruebas:
Paracetamol, simpaticomiméticos, antidepresivos tricíclicos, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, inhibidores de la recaptación de serotonina norepinefrina, ciclobenzaprina, levodopa, inhibidores de la monoaminooxidasa, algunos bloqueadores alfa (fenoxibenzamina) y beta (atenolol, metoprolol. propranolol), marihuana y drogas ilícitas como la cocaina.

Imágenes
El diagnóstico por imágenes suele utilizarse cuando las pruebas bioquímicas sugieren la existencia de un feocromocitoma o un paraganglioma. Las imágenes ayudarán a identificar dónde, cuántos y el tamaño del tumor o los tumores. Los exámenes de elección son la tomografía axial computarizada o la resonancia magnética nuclear.

Las imágenes funcionales son aquellas en las que se utiliza una sustancia radioactiva para tomar imágenes del cuerpo. Algunas de estas sustancias radiactivas también pueden utilizarse para el tratamiento del feocromocitoma metastásico.

La Sociedad de Medicina Nuclear e Imagen Molecular dispone de muchos recursos en línea para explicar el uso de ambas y abordar cuestiones sobre la exposición a la radiación.

Tomografía axial computarizada (TAC):
En un TAC se toman una serie de imágenes detalladas del interior del cuerpo en lugares como el cuello, el tórax, el abdomen y la pelvis. Las imágenes, tomadas desde distintos ángulos, las realiza un ordenador conectado a un aparato de rayos X. Puede inyectarse un contraste en una vena para que los órganos o tejidos aparezcan con mayor claridad. Este procedimiento también se denomina tomografía computada o tomografía axial computada.

Resonancia magnética nuclear (RMN):
Una resonancia magnética utiliza un imán, ondas de radio y un ordenador para obtener una serie de imágenes detalladas de zonas del interior del cuerpo como el cuello, el tórax, el abdomen y la pelvis. Este procedimiento también se denomina resonancia magnética nuclear (RMN).

Imágenes funcionales:
Las imágenes funcionales permiten a los médicos ver cómo funciona el organismo y medir sus procesos químicos y biológicos. En el caso de los feocromocitomas, el diagnóstico por imagen funcional puede incluir los siguientes radiofármacos: 123I-MIBG, 18F-FDG-PET/CT, 18F-DOPA-PET/CT o 68GaDOTATATE PET/CT. Se inyecta una pequeña cantidad de radiofármaco en el paciente y se detecta mediante cámaras especiales para obtener imágenes muy precisas de la zona del cuerpo que se está estudiando.
Las imágenes funcionales pueden utilizarse para identificar dónde se encuentran los tumores y si una enfermedad ha progresado a otras partes del cuerpo (metástasis). Debido a que el precio de estas pruebas puede ser muy elevado, no siempre están disponibles y muchas veces es posible que no las cubra el seguro médico.

Tratamiento

INFORMACIÓN GENERAL SOBRE EL TRATAMIENTO
Si el feocromocitoma y el paraganglioma se diagnostican a tiempo, estos tumores se pueden tratar y curar en la gran mayoría de los casos. El tratamiento de elección es la cirugía o extirpación del tumor o de los tumores. En algunos casos, es posible que el tumor no pueda extirparse quirúrgicamente. La quimioterapia, la radioterapia, y/o la radio farmacoterapia son opciones de tratamiento para pacientes con tumores que no son operables. En algunos pacientes, un médico experimentado puede sugerir únicamente un seguimiento periódico del tumor si este no secreta catecolaminas, si no causa síntomas y si el tumor no crece o permanece estable a través del tiempo. Si el tumor no es estable y/o causa síntomas, el tumor se debe tratar. Si no se trata, la hipertensión arterial y/o la enfermedad metastásica (cuando el tumor se extiende a otros órganos) pueden poner en peligro la vida de la persona.

OPCIONES DE TRATAMIENTO

Cirugía

La cirugía para extirpar el tumor o tumores es la opción de tratamiento preferida. Puede realizarse por vía laparoscópica o robótica, que es menos invasiva, o abierta haciendo una incisión más grande.
En el caso del feocromocitoma, si fuese posible, es preferible preservar parte posible de la glándula o glándulas suprarrenales. La adrenalectomía debe evitarse en la medida de lo posible para evitar complicaciones de por vida relacionadas con la insuficiencia suprarrenal. Además, durante la operación se examinan los tejidos y los ganglios linfáticos del interior del abdomen y, si el tumor se ha extendido, también pueden extirparse. Los pacientes deben ser preparados para la cirugía con medicaciones que permitan mantener la tensión arterial y la frecuencia cardíaca normales durante el procedimiento.

Antes de la cirugía
Antes de la cirugía, el paciente debe estar adecuadamente “bloqueado con medicaciones” que permitan prevenir complicaciones causadas por la liberación de hormonas durante la cirugía. Dar anestesia sin bloqueo previo es muy arriesgado ya que puede hacer que los tumores liberen cantidades masivas de catecolaminas. La manipulación del tumor durante la cirugía también puede provocar esta liberación, lo que puede provocar una crisis hipertensiva e incluso la muerte. Por este motivo, no es aconsejable que los pacientes se realicen a una biopsia del tumor si se sospecha de feocromocitoma o paraganglioma.
Es sumamente importante que los profesionales involucrados en el cuidado del paciente tengan experiencia con la cirugía del feocromocitoma y que los pacientes estén “bloqueados” para obtener el mejor resultado posible. Se prescriben bloqueadores alfa y beta para normalizar la presión arterial y la frecuencia cardiaca protegiendo a la persona de los efectos de los altos niveles de catecolaminas liberadas durante la cirugía. El bloqueo debe seguir un orden: en primer lugar, se prescribe un bloqueador alfa como fenoxibenzamina, doxazosina, o terazosina. Una vez la persona desarrolla hipotensión o taquicardia, se prescribe un bloqueador beta para proteger el corazón. A veces se necesitan otras medicaciones como los antagonistas de canales de calcio (nifedipina, amlodipino, etc.). También es importante recomendar una dieta rica en sal y buena hidratación antes de la cirugía.

Seguimiento postoperatorio
Las pruebas de metanefrinas en orina y/o plasma debe repetirse entre 2 y 8 semanas después de la intervención quirúrgica para comprobar si queda algún resto de la enfermedad. Se recomienda un seguimiento regular a largo plazo para todos los pacientes. Deben realizarse análisis anuales de orina o plasma para el feocromocitoma de por vida para detectar enfermedad remanente, reaparición de la enfermedad o desarrollo de metástasis. En la mayoría de los casos, no es necesario realizar un TAC o RMN de seguimiento si los resultados de los análisis de orina y plasma son normales. Las excepciones pueden ser la identificación de una mutación genética o si el tumor primario era de gran tamaño. Más información sobre mutaciones genéticas en esta página.

Metastático
Un 15% a 25% de los feocromocitomas y paragangliomas se han diseminado a otros órganos. Se recomienda que los pacientes con enfermedad metastásica reciban tratamiento de un equipo multidisciplinario y con experiencia en el manejo de estos tumores.

Es muy difícil curar los tumores metastásicos. Sin embargo, las opciones de tratamiento existentes pueden reducir el tamaño de los tumores, prevenir complicaciones mejorar los síntomas y prolongar la supervivencia. El pronóstico de los tumores metastásicos es variable y depende del tamaño del tumor. Algunas mutaciones genéticas tienen más probabilidades de desarrollar metástasis. El feo metastásico a menudo se propaga al hueso, a los ganglios linfáticos, los pulmones y el hígado.

El tratamiento del feo metastásico puede incluir cirugía, terapia con MIBG (Azedra, el único tratamiento aprobado por la FDA para el tratamiento de feocromocitomas o paragangliomas metastásicos), PRRT (Lutathera), quimioterapia y otros.

Hay medicaciones con mecanismos de acción muy interesantes que están siendo evaluadas en ensayos clínicos. La participación en estudios o ensayos clínicos con medicaciones en investigación para personas con enfermedad progresiva es fundamental para encontrar nuevos y efectivos tratamientos. Es importante explorar estas opciones. Visite nuestra página web de ensayos clínicos para obtener más información.

el embarazo
Para encontrar un equipo experimentado, consulte nuestro programa Centro de Excelencia aquí.
Mire este seminario sobre feocromocitoma y paraganglioma y embarazo. Preste especial atención a la sección de preguntas y respuestas. Estas preguntas fueron enviadas por pacientes

El embarazo en una persona con un feocromocitoma o un paraganglioma puede ser estresante e incluso peligroso para la madre y para el bebé. Sin embargo, es posible que el embarazo se lleve a término y sin complicaciones y que el bebe nazca saludable, incluso en pacientes con enfermedad metastásica. Es muy importante que la evaluación previa al embarazo y durante el embrazo se lleve a cabo por un equipo multidisciplinario y con experiencia en pacientes embarazadas con feocromocitomas y paragangliomas. Este equipo debe evaluar cuándo durante el embarazo estos tumores se pueden operar, su secreción hormonal y tratamiento con medicaciones, su ubicación y su predisposición genética.

Puede compartir estas mejores prácticas clínicas con su equipo médico:
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31345526
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33961120/

Planificación familiar

Si usted o su pareja tienen una predisposición genética o familiar para desarrollar feocromocitomas y/o paragangliomas, su hija o hijo tendrán una probabilidad del 50 % de heredar la mutación genética.

Lea más sobre mutaciones genéticas aquí.

En este caso, las pruebas de diagnóstico genético preimplantacional se pueden usar con la fertilización in vitro para evitar que la mutación pase a la hija o al hijo. Tratamientos de fertilidad pueden reconocer e implantar embriones que no tengan la mutación genética. Si ya está embarazada y desea realizar pruebas genéticas prenatales, se recomienda consultar con un asesor genético prenatal (findageneticcounselor.com). Hay opciones de pruebas genéticas que utilizan muestras de vellosidades coriónicas y/o amniocentesis en varios puntos del embarazo; esta evaluación se debe realizar por un especialista.

Para personas que planean quedar embarazadas, no hay evidencia que sugiera que los tratamientos de fertilidad, hormonas como los estrógenos y la progesterona o que el embarazo pueda desencadenar la formación o el crecimiento de uno de estos tumores. Es también importante mencionar que los feocromocitomas y los paragangliomas no previenen o impiden la fertilidad.

Diagnóstico antes del embarazo
Si ha tenido o tiene un feocromocitoma o un paraganglioma o si tiene enfermedad metastásica, es fundamental tener un plan de tratamiento y seguimiento para garantizar los mejores resultados posibles para la madre y el bebé durante el embarazo. Esto plan incluye por ejemplo pruebas de imágenes y pruebas hormonales, tomar bloqueadores alfa y beta y otras medicaciones como los bloqueadores de los canales de calcio, etc. Por ejemplo, se pueden considerar pruebas bioquímicas o imágenes como resonancia, la tomografía o el PET antes de la concepción. Debido al riesgo de exposición a la radiación, solo se recomienda la resonancia magnética nuclear durante el embarazo.

Diagnóstico durante el embarazo
El diagnóstico de feocromocitomas y paragangliomas durante el embarazo puede ser muy difícil de establecer ya que en algunas pacientes embarazadas la presión arterial se eleva y condiciones como la preeclampsia o la eclampsia pueden tener síntomas similares a los de los feocromocitomas y los paragangliomas. Hay sin embargo algunos aspectos que pueden ayudar a sospechar estos tumores:

La hipertensión causada por feocromocitomas y paragangliomas puede estar presente durante todo el embarazo, mientras que en la preeclampsia y en la eclampsia, la presión arterial se eleva en el tercer trimestre del embarazo. La hipertensión causada por los feocromocitomas generalmente no se asocia con inflamación de los tobillos, proteinuria o un aumento del nivel de ácido úrico en plasma. Finalmente, la hipotensión que ocurre al levantarse la mujer después de estar sentada o acostada (ortostatismo) puede ser un síntoma de feocromocitoma o paraganglioma, pero no de preeclampsia o eclampsia.

El diagnóstico de feocromocitomas y paragangliomas en mujeres embarazadas se hace midiendo las metanefrinas en orina de 24 horas o en plasma igual a como se hace en mujeres no embarazadas.

Los síntomas de feocromocitomas o paragangliomas pueden empeorar durante el embarazo. Para personas diagnosticadas durante el embarazo, tratamiento con bloqueadores alfa ( por ejemplo: fenoxibenzamina y doxazosina) seguidos de bloqueadores beta es usualmente recomendado ya que estas medicaciones protegerán al madre y al bebé del exceso de catecolaminas. También se pueden recetar bloqueadores de los canales de calcio si la presión arterial alta aún no está bien controlada. Si la presión arterial y los síntomas están bien controlados con medicamentos, sus médicos tratantes podrían sugerir retrasar la cirugía hasta después del parto. Si se recomienda cirugía, por lo general es óptimo hacerle durante el segundo trimestre del embarazo. Después de la cirugía, los síntomas deben desaparecer Para las pacientes en quienes se pospone la cirugía hasta después del parto, se prefiere la cesárea como el método de parto preferido.

Post-Embarazo
A las nuevas mamás a menudo se les recetan medicamentos. Es importante tener en cuenta que diferentes tipos de medicamentos de uso frecuente, como la metoclopramida, los esteroides y los simpaticomiméticos, pueden causar síntomas que dan lugar a una crisis de catecolaminas. Si su equipo   médico sugirió esperar hasta después del parto para extirpar quirúrgicamente el tumor, lo más probable es que se programe después de algún tiempo una vez se recupere del parto. Después de extirpar los tumores, los síntomas deben desaparecer, pero esto puede llevar tiempo. Además, recuerde que debe ser evaluada periódicamente para detectar tumores tempranamente.

Agradecimiento especial al Dr. Camilo Jimenez, Dr. Jaydira Del Rivero y Dr. Valeria de Miguel por su ayuda en la traducción de esta página.